La ordenación urbanística es una función pública regulada por la Ley Estatal y autonómica. No es competencia de las NUT quitar todas las limitaciones existentes. Lo único que es posible hacer desde las NUT es bajar el grado de exigencia al mínimo posible pero no es posible salirse del marco legal establecido.
Por otro lado que cada cual haga lo que quiera supone una clara vulneración de los derechos de los demás. Es verdad que la gestión urbanística es extremadamente compleja y excesiva en muchos casos para los pequeños municipios pero un territorio sin regulación sería como el salvaje oeste.